Imagen destacada (portada) Pintura Rupestre, 6.000-1.500 a.C
Tassili N’Ajjer, desierto del Shahara, Argelia.
La domesticación del hombre fue toda una aventura para nosotros. Veníamos de condiciones realmente difíciles; la naturaleza puede ser muy salvaje. Nuestra sensibilidad dentro del clan era más de tipo social, jerarquizada eso sí, pero cuidábamos los unos de los otros y permanecíamos juntos. Al anochecer nos reuníamos para contarnos las anécdotas del día y aullar a la luna.
Durante nuestras incursiones en busca de alimento encontramos otra especie que después de observarla detenidamente, parecían tener vínculos similares a los nuestros. Pero ¡pobres!, ellos iban a dos patas, lo que les dificultaba mucho la tarea de correr, cazar y cargar con peso. Por ello pensamos que podíamos agrandar nuestra manada aunando fuerzas tanto para sentirnos más seguros y ampliar nuestro territorio como para conseguir presas más grandes y jugosas,
¡ÑAM! ¡ÑAM!
Resulta que los humanos también se reunían al anochecer y su calorcito nos invitó a acercarnos más a ellos. Nos gustaba su compañía y nos encariñamos de ellos. Cada uno eligió a un individuo al que cuidar y proteger según el grado de afinidad que sentían mutuamente. Descubrimos que corrían desordenados para cazar sin tener ninguna estrategia y tuvimos que buscar la forma de tenerlos bien cerca para enseñarles.

Hace más de 8.000 años.
Al principio atamos nuestra pata a su pie pero era un desastre para movernos juntos: tropezábamos, la presa nos descubría y se nos escapaba. Luego probamos con su muñeca y nuestra cola, pero así no podían usar el arco y nosotros sufríamos de las vértebras del sacro. Así que finalmente encontramos una zona fija en su cintura que unida a nuestro cuello mediante una cuerda flexible (usaban tendones de animales) conseguíamos entendernos realmente bien. Nosotros tenemos mucha fuerza en el cuello y ellos tenían las manos libres para cazar.
En esta nueva manada también dividíamos las tareas: los más jóvenes y fuertes ayudábamos en la caza. Los más ancianos cuidaban a los cachorros de ambas especies proporcionándoles calor y transmitiéndoles los lazos de nuestra unión. Y los más mansos ayudaban en las tareas de recolección y transporte de cargas para los nuevos asentamientos. Poco a poco nuestro vínculo pasó a ser más fuerte, más emocional; su olor nos atravesaba el cuerpo y nos manteníamos juntos como los mejores compañeros. Entonces fue cuando comenzaron a representarnos en las pinturas que realizaba el chamán del clan (el boss) para dejar constancia de nuestra fantástica colaboración.



Dejar constancia de nuestra fantástica colaboración
En el arte rupestre la representación de nuestra especie tardó un poco en llegar. Las primeras pinturas sobre animales tenían un significado específico: se representaban con un fin mágico de llamada (para atraer animales y poder cazarlos) o como advertencia y protección (para mantenerlos lejos de los asentamientos). Llegó un momento en el que nosotros, los lobos convertidos en amigos del hombre, dejamos de ser considerados peligrosos y pasaron a representarnos en sus pinturas, acompañándolos en la caza y apreciando nuestras cualidades.



Tan fuerte acabó siendo nuestro vínculo que nos enterraban con todos los honores: a veces con trofeos de caza como collares de dientes de ciervo, otras con utensilios domésticos e incluso a uno le enterraron con un hueso de Mamut en la boca
¡Qué crack tuvo que ser ese antepasado!
Entonces nos enterraban junto a nuestro compañero humano: así podíamos guiarlos y protegerlos en el más allá pues nuestros espíritus viajaban juntos en busca de más aventuras.



Aquí podemos ver a un antiguo antepasado nuestro con la cola enroscada y orejas puntiagudas semejante a un spitz. El trazo y la delicadeza con la que fuimos plasmados demuestra el aprecio que nos tenían.
En la Edad de Bronce (3000-1000 a.C.) se pueden encontrar 4 tipos de perros representados, de los que hablaremos más adelante:
- SPITZ
- PASTOR
- MOLOSO
- LEBREL
Pintura rupestre
Pintura Rupestre, 6.000-1.500 a.C
Tassili N’Ajjer, desierto del Shahara, Argelia.



En esta misma cueva se halla esta pintura de un antepasado perruno con un cuerpo más estilizado, cola larga y similar al galgo.
Seres humanos y animales
Pintura Rupestre, 6.000-1.500 a.C
Tassili N’Ajjer, desierto del Shahara, Argelia.









Cueva de los perros
Neolítico-Calcolítico, Zarza Capilla, Extremadura.
Estas pinturas destacan por la escenificación de una fila de nueve perros, alineados como si estuvieran tirando. Las pinturas están hechas con pigmentos minerales (óxido de hierro) de un color rojo oscuro. Ésta se aplicaba tanto con el dedo como con pequeñas herramientas.



Escenas de caza talladas sobre arenisca.
Shuwaymis, noroeste de Arabia Saudí. Hace más de 8.000 años.
En la parte superior de la fotografía se ha rellenado virtualmente la silueta de las figuras talladas para una mejor comprensión de la escena. Es en la parte inferior dónde vemos la talla original, en un bajorrelieve muy sutil.
Nuestros Amigos felinos siguieron un proceso similar al acercarse a los asentamientos de los agricultores para predar los roedores que acechaban las cosechas. ¡Los humanos son una fuente inagotable de recursos!



Así quiero descansar yo eternamente junto con mi amita 🖤
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21 comentarios
Los chuchos han sido siempre nobles y de buena voluntad.Mira que decir que ellos amarraron su pata al pie humano- El humano inventó la correa y la ha comercializado de manera increíble.
Guau, guau, guau de agradecimiento de parte Lucy y muchas gracias de mi parte por ese artículo! Nos encantó! El vínculo entre el perro y el humano es muy fuerte y de mucha sensibilidad! Ellos, nuestros maravillosos compañeros peludos, nos enseñan mucho y nos aman sin condiciones durante toda su vida! Somos más felices con ellos a nuestro lado y también los amamos!
Guaus con lenguetazos y saludos afectuosos de Lucy y Alicia!
Guauu Lucy, aquí al habla Picasso Perro Pastor, editor jefe de la revista Cave Canem. Saludos también a tu humana Alicia con un alegre movimiento de cola. Me alegro que os gustara el artículo, no quiero echarme flores pero… fui yo quién se lo ladré a Paula para que lo tradujera a palabras humanas. ¡Quién sabe si los humanos prehistóricos hubieran evolucionado tanto sin nosotros! Los pobres, con sus dos patas largas no podían ir detrás de grandes presas; así que nos apiadamos de ellos y, a cambio de un poquito del «pastel», nos decidimos a prestarles nuestro olfato y velocidad para cazar presas exquisitas.
Si te ha gustado el tema, te dejo aquí el enlace a otro artículo con las heroicidades de Barry, un San Bernardo capaz de sacrificarse por cualquier persona que necesitase una ayudita en plena ventisca.
Un ladrido afectuoso,
Picasso Perro Pastor
Antes que nada un Guauuu por tan buen artículo, creo que los humanos y los perros han creado un vínculo que va más allá de la amistad, oí por ahí que cuando tu convives con un humano le enseñas con tu actitud y comportamiento a descubrir sus fallas de carácter y emocionales, los perritos estaremos siempre quietos y tristes si tenemos un (a) amo triste y pasivo o tal vez depresivo, estaremos gruñones si tenemos un compañero (a) frustrado o enojado en fin podríamos enumerar muchos rasgos de estos, lo principal es hacer notar que somos una parte importante de su vida ya que tenemos la misión de ayudarlos en su vivir diario simplemente con observarnos y sobre todo amarnos.
Saludos.
Paula&Picasso
Muchos Guaus, me alegro de que te gustara mi artículo (traducido al humano por Paula, claro está). Estoy de acuerdo con la «transmisión» de emociones y sentimientos humano-perro. Cuando me encuentro algún perro que me gruñe por la calle sin motivo alguno, Paula me dice tranquilamente: «está de mal humor», pero yo, con mi super órgano olfativo que detecta las feromonas, sé que quién está de mal humor es su humano. La verdad es que mi amita se relaja sólo con mirarme, con saber que estoy ahí, ¡no tengo que hacer nada más!
Un choque de Patitas,
Picasso Perro Pastor
Un vínculo tan antiguo, pero es necesario recordarlo todo el tiempo porque parece que se les olvida a los humanos, especialmente.
Desde luego Malkya, a veces parece que los humanos tenemos menos memoria que los perros. Ellos son fieles desde que nos conocen, ¡hace más de 100.000 años! Nosotros a veces flaqueamos un poco cuando se nos olvida la inestimable ayuda que nos prestan.
Gracias por instruirnos, hermoso articulo y muy interesante! con razón los queremos tanto!
«Guau y nosotros los perros a vosotros los humanos» 🐺🧡🙋♀️ Picasso Perro Pastor
Excelente artículo
Muchos guaucias Carla! Nos seguiremos esforzando para hacer artículos como este 🐺🧡🙋♀️
Fantástico artículo ¡Felicidades y gracias!
Guau! Mil ladridos, se lo diré a mi amita para que siga esforzándose en ofrecer el mejor contenido sobre el canis lupus familiaris en el Arte.
Un Guau afectuoso a todo el equipo.
Siempre es un placer leerlos, aprendemos mucho de esta publicación.
Gracias manada! Me alegro mucho de que disfrutéis de lo que le ladro a mi amita para que os lo cuente desde mi perruno punto de vista. Seguimos en contacto!
Muy interesantes vuestros artículos, enhorabuena por el trabajo.
Guau! Muchísimas gracias Albert
Cómo es posible que si tanta relación amable existió en Arabia, hoy en día se da pena de muerte a quien tenga un perrito dentro de su casa. El humano es ingrato y mal agradecido.
Es un tema para investigar y reflexionar, desde luego. Al ser humano, con todas sus capacidades, a veces se le pasan cosas por alto que hay que recordarle. Me lo apunto para investigarlo y ver qué falló en ese vínculo perro&humano 🙂
Saludos,
Paula&Picasso.
La religión, sencillamente… En el musulmán (no todo, por supuesto) el perro no es bien considerado.
En la Edad Media, en Europa, los gatos eran perseguidos por representar al maligno. Otra vez la religión por medio.
Solo en las culturas más ancestrales se mantiene una relación humano-animal más natural.
Es un tema para investigar y reflexionar, desde luego. Al ser humano, con todas sus capacidades, a veces se le pasan cosas por alto que hay que recordarle. Me lo apunto para investigarlo y ver qué falló en ese vínculo perro&humano 🙂
Saludos,
Paula&Picasso.